Muchos son los criterios que se
pueden aplicar a la casa del futuro y uno de ellos es el uso de energías renovables. Cada vez
estamos más concienciados de dotar a nuestra oficina o vivienda de sistemas que
permitan ahorrar energía o, incluso, generarla para que cualquier tipo de
edificio sea autosuficiente energéticamente. Pero, ¿cuáles son los principales
sistemas más comunes en el mercado?
Energía solar: uso de placas fotovoltaicas
Las placas fotovoltaicas son una buena solución para generar
electricidad, sobre todo si un edificio se encuentra en zonas rurales o
aisladas de la gran metrópoli. Son una alternativa eficaz a los generadores
–sucios y caros por su consumo de combustible- y permiten que un edificio sea
más sostenible.
Energía eólica: solamente para lugares con un mínimo nivel de viento
La energía eólica nos permite
generar electricidad mediante la fuerza
del viento, pero este sistema solamente resulta rentable si nos encontramos
en una zona con un mínimo nivel de viento. Para asegurarnos, deberemos primero
contratar a un experto para que nos facilite un mapa eólico, y así veremos si
es rentable instalar un sistema de este tipo.
Los sistemas de energía eólica
constan de 4 partes: el aerogenerador,
un molino que transforma el viento en electricidad; los acumuladores, baterías que almacenan la electricidad generada; el regulador, controla la generación de
electricidad y evita sobrecargas; el inversor,
transforma la electricidad almacenada en corriente continua para su uso
doméstico.
Biomasa: el calor de la naturaleza
Como biomasa se conocen todos los
tipos de combustibles de origen natural
que, mediante su combustión generar calor y, en consecuencia, energía para
alimentar viviendas y edificios. Huesos de aceitunas, cáscaras de frutos secos,
leña o virutas de madera son las fuentes de energía natural que usan las
calderas de biomasa.
Hoy en día, la biomasa se usa
principalmente para la generación de calefacción y agua caliente, aunque se
espera que en un futuro se convierta en un sistema de generación de energía más
completo. De hecho, muchas empresas tienen sistemas avanzados que permiten usar
la biomasa como complemento al uso de energía de la red eléctrica convencional.
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